miércoles, 5 de diciembre de 2007

Evolución – Involución



Acerca de un sorprendente hallazgo en Alemania


Reproducimos a continuación la información del reciente hallazgo realizado en Alemania de un sorprendente fósil de escorpión marino que habría alcanzado los 2, 5 metros. Los expertos, ciertamente, han quedado perplejos. ¿De qué se trata todo esto? ¿Evolución? ¿Involución? ¿Qué ha sucedido? Si analizamos el desarrollo de las especies que existen en el planeta, terrestres y acuáticas, todas provienen de una u otra manera, de especies de mayor tamaño, de mayor envergadura y capacidad, que se han adaptado a las nuevas condiciones climatéricas y ambientales en larguísimos procesos biológicos. Sin embargo, ¿cómo se explica la presencia de enormes insectos y animales en el pasado, el mayor tamaño de las plantas y árboles en la Era Primaria y Secundaria? ¿Cómo se explica, además, el hecho que la gran mayoría de las especies existentes en la actualidad (roedores, auquénidos, felinos, paquidermos, etc.) sean especímenes de menor tamaño que sus ancestros, prácticamente en todos los continentes y que también éstos últimos vivieran más tiempo?

La clave la ha entregado Hans Hörbiger en su brillante obra la Cosmogonía Glacial (1913), donde expone la dinámica cósmica a la que se haya sujeta el planeta y la espiral cíclica de atracción y repulsión de los cuerpos celestes y sus efectos sobre la Tierra. En ese sentido, la presencia de una Luna anterior (Terciaria) a la actual, con un campo gravitacional mayor que el presente, explicaría según el ingeniero Hörbiger el mayor tamaño de los seres vivos en el pasado del planeta.

Rafael Videla Eissmann


Descubren fósil de escorpión marino más grande que un hombre

París.- Un fósil de pinza proveniente de un escorpión marino cuya talla podría haber alcanzado 2,5 metros fue descubierto en Alemania, indica un estudio publicado en línea en la revista británica Biology Letters, de la Royal Society.

Este fósil, descubierto en una cantera cerca de la ciudad de Prüm, en una roca de unos 390 millones de años, permite pensar que en esa época existían arañas, insectos o cangrejos mucho más grandes de lo que se pensaba, estiman los autores del estudio.

La pinza pertenecía a un escorpión de mar, un euriptérido llamado "Jaekelopterus rhenaniae", que vivía hace de 460 a 255 millones de años. Tiene 46 cm de longitud, lo que supondría que el animal al que pertenecía medía 2,5 metros, unos 50 cm más que las antiguas estimaciones para los artrópodos más grandes.

"Sabíamos desde hace un tiempo, gracias a los fósiles, que había ciempiés monstruosos, escorpiones de gran talla, cucarachas colosales y libélulas enormes, pero nunca caímos en cuenta de lo grandes que podían llegar a ser algunos de estos bichos reptiles hace tanto tiempo", subraya uno de los descubridores, el profesor Simon Braddy, del departamento de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Bristol.

Los euriptéridos serían una especie acuática desaparecida, ancestro de los escorpiones y, según algunos, de todos los arácnidos.

Ciertos geólogos estiman que les artrópodos gigantes debían su talla a un índice de oxígeno alto en esas épocas, y otros piensan que evolucionaron coincidiendo con una especie de "carrera armamentista", en paralelo con su principal presa, los primeros peces con caparazón.

Para Simon Braddy, "no existe una explicación simple. Pero existen buenas razones para pensar que si ciertos artrópodos antiguos eran grandes, se debía más bien a una escasa rivalidad con los vertebrados, al contrario de lo que vemos hoy".

Fuente: AFP - Diario La Segunda. 21 de Noviembre de 2007.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Un esqueleto singular


De tanto hacer excavaciones, el famoso antropólogo César de La Martinique, encuentra el esqueleto de un homo sapiens en la zona de Chañaral Alto, cuya antigüedad se puede estimar en varios miles de años.

La noticia recorre el mundo entero y desde los países más remotos de la tierra, arriban a Chile sabios muy célebres a examinar el hallazgo.

Después de meses de exhaustivas investigaciones, se llega a la conclusión de que se trata del descubrimiento má sorprendente de todos los tiempos.

El esqueleto tiene una costilla de menos, lo que hace suponer que pertenece al mimísimo Adán.

Walter Garib

Diario Las Últimas Noticias. 16 de Febrero de 1998.

viernes, 12 de octubre de 2007

Editorial


En las montañas de la Verdad nunca se sube en vano;
se alcanza un punto elevado hoy ó bien
se preparan los poderes
para ascender aún más alto mañana.

Friedrich Nietzsche.

A principios de 1770 salió de Cádiz con 300 tripulantes y pasajeros el velero Oriflama. Pertenecía a la firma naviera Ustáriz. La nave venía hacia América al mando del capitán José Antonio Alzaga y del piloto Manuel de Buenechea. Desde que entró al Pacífico hincharon las velas de la nave vientos que presagiaban terrible tragedia. Una epidemia misteriosa y el hambre diezmaron la tripulación y pasajeros.

Al atardecer del 23 de Junio de 1770, el Oriflama fue avistado en las cercanías de Valparaíso por el velero Gallardo, comandado por el capitán Juan Esteban Gallardo. Allí, entonces, comenzó su leyenda áurea. El Oriflama devino en un barco fantasma que recorre los puertos del litoral chileno. Se le conoce con los nombres de la Nave de los Agonizantes, la Nave de los Muertos y el Cementerio Flotante. Se le ha visto numerosas veces en Valparaíso, Constitución y la costa de Arauco.

Como estos navegantes fantasmas, como los argonautas, navegamos en las aguas del espíritu y de la materia, en una búsqueda eterna del ser y del conocimiento. Navegamos en las espantables aguas del Océano del Espíritu, en búsqueda del conocimiento.

Rafael Videla Eissmann
Editor de El Oriflama